lunes, 23 de junio de 2008

Los demonios de tazmania: un poroto

Una foto que tal vez no sea del bicho que voy a describirles. Pero es muy parecido.

Hoy voy a inaugurar la seccion de faunistica. He recibido innumerables mails suplicandome que hiciera algo por mi vida o al menos dedicase mi tiempo a escribir sobre cosas interesantes.

Por esta razon hago eco de los pedidos y hoy me sumergo en la vida de un ser de estas tierras.

Me encuentro en Salento, un pueblito turistico del Quindio. Una zona de mucho bosque ( el mucho es un decir, porque vio doña estan dele cortar arboles para poner ganado). Puerta de entrada al Valle del Cocora, habitat de la palma de cera, el arbol nacional de Colombia. Que vaya uno a saber porque es la unica palmera de frio y aqui hay por montones. Fue esta zona en alguna epoca, boom de la explotacion de oro y los indios practicaban la tecnica de la cera perdida.

NO me preguntes mas que sino me voy a desviar de mi objetivo. Aunque unos gringos que quieren usar Sky, me acaban de interrumpir....

Y yo me pregunto encima de que tiene mucha mas plata de nosotros, qeu simplemente andan de vacaciones, que en unos meses se vuelve a ver con su familia y amigos, saben usar el Sky, que es un programa para hablar por telefono por internet. Y nosootros como unos pelotudos buscando llamadas a 200 pesos el minuto por todos lados.

NO me desvio mas, les voy a presentar al cusumbito. Es un bicho, que se puede enmarcar dentro de la familia de los roedores. Nuestro encuentro con una parejita de ellos fue una cosa casual.

En La casa de la senora nieves, donde estamos acampando (cuasi un cambuche militar el nuestro) hay dos ejemplares metidos en una jaula. La verdad es que dan mucha pena y uno se pregunta que hacen ahi dentro. La respuesta fue mas que clara al ser liberados los bichos para el respectivo paseo o descontrol diario.

Son unos bichos pequenitos, parecidos a una ardilla, pero con un hocico hurgador. Son bien simpaticos, hasta que comienza a hurgar, huzmuear, trepar, morder e investigar todo lo que se les aparece. Uno dice que lindos bichos los primeros minutos. Luego comienzan a agotar su paciencia y son mas terribles que tener un jardin de infantes en el patio de la casa.

Tiene una energia inagotable para hacer macanas, romper, comer o meter el hocico en donde sea. Me encontraba leyendo placidamente y uno de ellos clavo sus garras a mis rastras, dandome a entender que no me dejaria tranquilo por el resto del dia.

Dejan el tendal por donde pasan. Hasta al perro se le tren y le muerden el pelaje, viendo si encuentran algo interesente por ahi.

Luego de esta breve descripcion se daran cuenta porque es que estan encerrados. Son bichos de monte, roedores que viven en sus cuevitas y comen guzanos y lo que encuentren. Domesticos se convierten en demonios de tazmania. Por eso es que nada tiene que hacer ahi donde estan.

Ayer de noche me entere la historia de esta parejita. Una senora lo encotro por ahi y los llevo a su finca, porque le parecieron tiernos y jugetones. Un artesano vecino, lo vio y convencio a la senora de que lo devuelva al monte. El convencimiento vino de la mano de la compra. NO hubo otra forma de negociar. El muchacho se interno en el bosque de su casa y los dejo ahi.

Los bichos ya acostumbrados a la vida domestica se devolvieron al camino y unos dias despues subidos a un caballo un militar los encontro y los llevo donde Nieves. Ella se encariño tanto con los bichos que los encerro. El artesano escucho los chirridos de los cusumbos y conto la historia a NIeves, quien se rehuso a devolverlos. Ahi es que andan entoces. Todos el dia colgados a la reja, esperando salir para hacer los desastres y travesuras propios de su ser.

Con esta nueva cronica animalesca me despido sin antes comentarle que estoy juntando figuritas de unos chocolatines que viene con imagenes de animales del mundo. Tengo unas 20 y si lleno el album ( 250) estoy seguro de que todos uds, lectores asiduos, me daran un lindo regalo.

Hasta la vista...

No hay comentarios: