Nuestro primer dia en la ruta estuvo plagando de incidentes desgraciados que por suerte no pasaron a mayores...
Tipo 4 de la tarde del sabado estabamos listos para salir, y como ocurre diariamente, arrancar la moto, insume algo asi como 5 minutos y unas 25 a 30 patadas al pedal. Dispuestos a empezar nuestra marcha nos topamos con embotellamiento y caimos en la cuenta de que la rueda de auxilio estaba desinflada y debajo de todas las maletas. No aguantaba sacar todo para inflarla asi que decidimos hacerlo asi nomas, con la rueda atada a la parrilla. En definitiva lo que ocurrio fue que la rueda se inflo presionando contra la luz trasera hasta quebrarla y dejarla vuelta mierda... No nos percatamos de eso hasta llegada la noche.
Una vez en la autopista Norte, preparados para meterle pata y salir con todo, un aguacero, no empapo en menos de cinco minutos. El tiempo enque tardamos en ponernos los pilotos fue suficiente para quedar pasado por agua. Nos refugiamos en una bomba para ponerle gasolina a la moto e inaugurar el mangeo de nafta a los automovilistas que por alli pasasen. Para colmo de males, mientras esperabamos que escampe o que aparezca el patrocinador que llene el tanque, un camion de refrescos, freno mal y dejo caer dos cajones de gaseosas al piso, provacando un desparramo de vidrios por toda la estacion de servicio. No temais, esta vez no pinchamos. Sin fortuna en el mangueo y con el tanque a medias volvimos a la ruta para experimentar la dolorosa sensacion de las gotas arañandote los ojos.
Al margen de algunas paradas tecnicas para averiguar la ruta a seguir, subimos al alto de matasanos sin problemas. Y la moto se porto terrible bien. Mas de 1 hora subiendo y ningun problema grave. Los tipicos: las subidas con poco impulso que se te ahoga la moto y toca bajarse y ver como mierda arrancarla en pendiente. Eso provoco un willie inesperado. La moto se paro en una rueda y amenazo con avanzar de esa forma.
Llegada la noche instalamos nuestra luz trasera desmontable. Una joya de ir de compras al mercado de pulgas de Medellin. Veniamos bien hasta que la luz delantera murio sin previo aviso. Al parecer hacia puente con el espejo. La realidad es que no andaba. Ya era de noche y no habia forma de abrir la tapa del foco para ver que sucedia. Toco improvisar con la luz del celular.
Ya le habiamos tomado el ritmo y acostumbrado el ojo a la oscuridad de la noche cuando no para el reten policial. - Como asi que andan sin luz. Orillen la moto y saquen los papeles ordeno el tombo
Uhhh,pensamos, hasta las bolas. Me baje de la moto y le pase los papeles y le adverti que me habian robado el registro de conducir. Sorprendido ante la avispada de tontos, el tombo replico que queria el registro de tuto, quien era el que conducía.
Ahi llego la hora de las excusas y las explicaciones. - No hermano, orille mas la moto, arremetio en policia. Ya nos vimos subiendo la moto a un camion y durmiendo en un puesto policial.
NO recuerdo como, pero logramos convencerlo de que eramos unos viajeros experimentados en esto de andar en la ruta con la moto, que estabamos buscando un lugar propicio para arreglar la luz delantera y que ibamos a un pueblo a hacer un dinero para sacar el registro.
A todo ritmo continuamos la marcha. Ya recontra cagados de frio, anduvimos cerca de media hora y paramos a cargar gasolina. A mangear mejor dicho. Fue breve, dos personas nos llenaron casi el tanque. Eran cerca de las 8 y media y remotamos la marcha buscando el desvio hacia San Jose de la Montana, el pueblo que nos esperaba para realizar nuestra presentacion. A Tuto se le dio por para de nuevo a ver si se podia arreglar esa luz. Estuvo un rato largo hasta que lo consiguio.
Mientras tomabamos una agua panela para recuperarnos del frio, no enteramos que nos habiamos pasado del desvio. Que fortuna que preguntamos.
El camino atravesaba fincas ganaderas de montana, verde puro verde. La ruta desolada y la luna que nos guiaba. En eso se nos da por parar a contemplar la noche. Del potrero lindante a la ruta un torito no parece estar de acuerdo con la ubicacion de estos extraños e intenta romper el alambrado. La furia del animal amenaza con salir a la carreta y arremeter contra estos indefensos motociclistas. Cagados de miedo y de risa, escapamos.
Detenidos un poco mas adelante en medio de la oscuridad, prendemos un baretico para relajar. El barandazo se exparse y un militar aparecido de la nada nos interroga detrasde un alabrado de una finca. Escena noctura, casi a oscuras. Tuto de cara. Yo sin temor, sabiendo que el milico, podrido de hacer guardia y de chupar frio, queria darse un ploncito.
Efectivamente, le pasamos unas secas y nos avisa que estamos en la finca del hermano del presidente, que la proxima no hagamos esto por aca... Reimos del nerviosismo ante tal noticia. Pusimos cara de vivo y continuamos la marcha.
El tema de la oscuridad lo veniamos piloteando bien. La luna nos echaba una mano en iluminar el camino. El problema empezo cuando los pozos en la ruta comenzaron a abundar. Dele esquivar, saltar y sentir como la parrilla del equipaje poco a poco se desoldaba y se balanceaba como un subi baja.
Finalmente sucedio lo temido. Ibamos lento, pero una seguidilla de pozos nos tumbo. Caimos lentamente a un costado de la desolada ruta. NO hubo tiempo para susto, porque el tanque empezo a derramarse. Lo unico que faltaba quedarnos sin gasolina. Levantamos la moto y sobrevinieron unos 10 minutos para volver a prenderla.
De ahi en adelante no hubo mas problemas, solo frio y una noche hermosa. Llegamos al pueblo y como era de esperar la moto se quedo en subida, justo en frente al puesto policial. Obviamente no sabian que veniamos a actuar. Razon por la cual, 5 minutos mas tarde estaba en una moto en la puerta de la casa donde nos alojamos intentando a veriguar quienes eramos...
Luego de esta larga cronica me despido. Manana retomamos la ruta rumbo al mar... Ya estamos curado de espanto. Todo puede suceder. HOy arreglamos los ultimos detalles, la luz y la parrilla yque sea lo que sea.
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